
Los jefes policiales que estuvieron al mando de los efectivos que reprimieron violentamente a los manifestantes el 14 de noviembre son los responsables de las muertes de los estudiantes Inti Sotelo Camargo y Jack Pintado Sánchez, según el informe de la Oficina General de Integridad del Ministerio del Interior, a cargo de Luis Naldos Blanco.
“La información obtenida permite sostener que se produjo la muerte de dos personas y lesiones graves en otras, cuya causa es atribuible a proyectiles (perdigones) de plomo y proyectiles de vidrio endurecido; y que por lo menos en un caso el disparo fue realizado por una escopeta del tipo usado por la Policía Nacional del Perú”, señala el informe que ha sido derivado a la fiscalía que investiga el caso de los crímenes de Sotelo y Pintado.
El documento señala que durante los días 12 y 14 de noviembre del 2020, la Policía Nacional usó indiscriminadamente armamento no letal contra los manifestantes, cuyas acciones se incrementaron justo en las zonas de la avenidas Abancay y Nicolás de Piérola, área donde fueron mortalmente heridos Inti Sotelo y Jack Pintado.
El informe concluye que el exsubcomandante general de la PNP Jorge Lam Almonte y el exjefe de la Séptima Región Policial Lima general Jorge Cayas Medina tuvieron conocimiento de plan de operaciones ejecutado entre el 9 al 14 de noviembre del 2020.