Hace varios meses la Municipalidad Provincial de Cajabamba puso en marcha un plan piloto para convertir los residuos orgánicos que generan las familias de esta ciudad, en abono para sus áreas verdes.
Los residuos que se pueden reciclar son cáscaras de frutas, vegetales, cascarones de huevos, desperdicios de alimentos, restos de café, té, pan, plantas, gras y flores.
En este plan piloto denominado “Reaprovechamiento de los residuos orgánicos donde se genera”, vienen participando dos instituciones educativas, ocho restaurantes, todos los puestos de comida del centro de abastos de Cajabamba y 250 viviendas de la zona urbana.
Además, en las próximas semanas se sumará el Instituto Superior Tecnológico “José Arnaldo Sabogal Diéguez”, que permitirá que el gobierno local, con la especialidad de Agropecuaria, trabaje en un centro experimental de abono orgánico que será procesado con diferentes técnicas en la misma casa de estudios, buscando comercializar el producto en el mercado local.
El municipio entregó a cada uno de los participantes contenedores de color marrón, en donde los residuos deben ser reciclados para ser recogidos todos los días y trasladados hasta el caserío de Nuñumabamba, en donde están las composteras y finalmente a través del respectivo proceso terminar en abono orgánico para ser usado en las áreas verdes de la ciudad.
Todos los participantes del plan piloto fueron capacitados durante varias semanas hasta lograr que el reciclaje sea de forma correcta. Hasta el momento se viene produciendo un promedio de 2 400 kilos de abono mensual que está siendo usado en todas las áreas verdad de Cajabamba. Fuente: Panorama Cajamarquino.